Ciclo de cuentos policiales

El día lunes 6 de Junio a las 19 horas se estará llevando a cabo el segundo evento del ciclo “Instrucciones para leer un cuento”, coordinado por Maximiliano Tomas. En esta ocasión el género abordado será el que aquí nos reune. Los escritores que se encaragaran de leer sus propios cuentos, ademas de contar porque aman este género, serán Ernesto Mallo (“La Aguja en el Pajar” / “Delincuente Argentino”), Diego Grillo Trubba (“Crimenes Coloniales I & II”) y Claudia Piñeiro (Betibú / Las Grietas de Jara / Las Viudas de los Jueves). El evento se llevara a cabo en El Ateneo Grand Splendid (Av. Santa Fe 1860 – 2do Piso). La entrada es libre y gratuita sujeta a la capacidad de sala.

Una buena oportunidad para disfrutar de estos tres grandes autores como una entrada en calor para lo que sera el BUenos Aires Negros a realizarse del 10 al 16 de Junio y coordinado por el propio Ernesto Mallo.

Festival Azabache – Resumen Día 1

Ayer Viernes 13 pasadas las 11 de la mañana, Carlos Balmaceda dió por inaugurado el Festival Azabache. En la Plaza del Agua, se habilitaron dos muestras diferentes; “Casos de Novelas” que son sucesos criminales reales que sucedieron en la ciudad de Mar del Plata; por otro lado, la muestra de Comics, con diferentes paginas con aire policial. A su vez en el lugar se proyectan una serie de Cortos: “El cirujano”, de Mariano Dawidson; “Los rengos”, de Javier Correa Cáceres; y “8cho”, de Paulo Pécora. También se verán “No me puedo quejar, a mí Saravia siempre me bancó”, de Martín Basterretche; “El bar donde Boris pierde el tiempo”, de Luis Maldonado; y “Blanco y negro”, de Nahuel Montes.

A la tarde, se presento la coleccion Tinta Roja, de la editorial Edivum (Cba). La serie aspira a mostrar la variedad de tendencias dentro del policial Negro. Cadáver se necesita, del escritor uruguayo Milton Fornaro, quien con áspero sentido del humor revela cómo el protagonista queda cautivo en un juego ingenioso de poder, drogas y dinero. . Judas no siempre se ahorca, novela de Lucio Yudicello, posee una ambientación rural (Traslasierra). La ciudad está triste, del chileno Ramón Díaz Eterovic es un valiente texto, escrito en plena dictadura pinochetista e iniciadora de una saga de doce novelas con el detective Heredia. Es la novela mas “negra” de la serie, inscripta en la tradicional del policial negro estadounidense. Ludicello remarco que “La aspiración última de gran parte del policial latinoamericano es definitivamente utópica: resolver en la ficción los crímenes, los de los detenidos desaparecidos, que en la realidad histórica de nuestras naciones permanecen impunes”. La otra novela presenta fue, Un corazón en la planta del pie, del cordobés Fernando López, nos ofrece un inquietante policial de ciencia ficción, que transcurre en una Córdoba futura y se constituye en una interesante herramienta para reflexionar, entre otras cosas, acerca de nuestra condición en el mundo y del marco ético que debería regir los avances tecnológicos.

A las 17 se presento la banda de jazz “Ensamble I.M.C.” que musicalizo el ambiente hasta la llegada de los platos fuertes del dia.

La primera de las charlas estuvo conducida por Balmaceda, y la mesa redonda estuvo formada por Gustavo Nielsen, Hugo Burel y el editor Mariano Valerio. La charla giro, de a ratos, en torno a la palabra Victima. Burel, hablo acerca de su novela “El Corredor Nocturno” la cual surgio de observar a la gente que corria diaramente por la rambla de Montevideo. El autor se sorprendía de por que hacían eso, y automaticamente ligo esto, a la pelicula Body Heat, en la que el protagonista se mata haciendo ejercicio y cuando termina de correr exhausto, se prende un cigarrillo. Para el, era la imagen perfecta del perdedor.
Me parecio interesante la inclusion del editor Mariano Valerio en la charla que comentaba acerca de su labor. El decia que el editor, se limita a guiar al escritor, ya que nadie conoce mejor la obra que el mismo autor. Comento que actualmente esta trabajando en su editorial Planeta, con los textos de Mariano Hamilton y Ernesto Mallo, ambos policiales negros inscriptos en el genero del Detective.

Cerró la noche, con una presencia importante de gente, una mesa redonda integrada por Ludicello, Claudia Piñeiro y Vicente Battista, cuya charla giró en torno a la palabra Inocente. La autora de la Vida de los Jueves afirmó que no existen inocentes, y lo relaciono con ciertos personajes de las novelas de Patricia Highsmith (autora nombrada por casi todos los autores). Dijo que a ella no le interesan los personajes inocentes, porque no son interesantes para contar las historias que ella queria relatar. A su vez leyó, una parte del clasico ensayo de Raymond Chandler, El Simple Arte de Matar: “un mundo en el que un juez con una bodega repleta de bebidas de contrabando puede enviar a la cárcel a un hombre por tener una botella de un litro en el bolsillo; en que el alto cargo municipal puede haber tolerado el asesinato como instrumento para ganar dinero, en el que ninguno puede caminar tranquilo por una calle oscura, porque la ley y el orden son cosas sobre las cuales hablamos, pero que nos abstenemos de practicar”